3/30/2005


Río Calle Calle Posted by Hello

3/18/2005

Un patio de rosas

Un ejemplo de belleza desprovista de artificios sin perder por ello su aura casi sobrenatural aparecía en un comercial de los ochenta donde una ninfa deambulaba por el bosque para terminar en un descampado bebiendo un conocido yogurt. Podría ser que “María llenas eres de gracia” repitiera aquella impresión angelical en estos días previos a la Semana Santa.
Dejando de lado las vestimentas etéreas de la Grecia clásica, los bluyines y las joyas de fantasía componen la ornamenta sencilla de María, una joven de 17 años poseedora de la hermosura seria que deja la resignación a la miseria sabiendo que la situación puede ser otra en un pueblo mexicano que subsiste con la plantación de rosas y el trabajo infrahumano a que son sometidas las lugareñas en una maquila de exportación.
Allí trabaja María con todo un porvenir que vislumbra en el horizonte desde el techo de una vivienda. Para ello cuenta sólo con el orgullo, la joya que guarda toda mujer pobre. Con un retrato bastante bajo para el macho latino (María sustenta un hogar de tres mujeres y es embarazada por alguien que no la ama) la cinta se sustenta en la fuerza interpretativa de la joven sin mediar el sexo para sobrevivir. Tanto argumento fatalista daría para un melodrama tantas veces visto en las telenovelas sudamericanas, si no fuera por la actuación de Catalina Sandino y el tratamiento descarnado al tráfico de drogas de las “mulas”.
Esta obra cuasi periodística recrea el mundo de las mujeres rebajadas a la categoría de animal para burlar los sofisticados métodos de detección de drogas en las fronteras de Estados Unidos. Es la vida degradada al máximo con tal de salvar las cápsulas de látex contenedores del mortal alucinógeno y que engullen las humildes mujeres mexicanas. Y en medio de todo eso, la vida que renace en el vientre de María y el futuro que se abre ante ella sobre la losa fría del desarraigo.
Escasea la solidaridad en el latinoamericano incapaz de hablar su lengua materna para ayudar a la forastera en una gasolinera. Por ello cuesta creer que los narcotraficantes, después de actuar con extrema violencia con Lucy, una de las mulas que retrata uno de los episodios más apremiantes del viaje hacia la ‘tierra de las oportunidades’, se comporten ante María y su amiga con tanta indulgencia.Así como un mismo invento aflora desde puntos distantes, esta obra refuerza la novela 2666 que nos legó Roberto Bolaño y que relata el asesinato de varias mujeres en Ciudad Juárez. Envueltos en el enajenamiento del lucro fácil, vale la pena ver este film realista y violento que solidariza con la esperanza de un mañana más justo.

3/11/2005

Sones de África

Quienes creían no conocer la música del cantante y pianista norteamericano Ray Charles, de seguro comenzarán a identificar varios de los temas que aparecen en Ray, la galardonada película de Taylor Hackford en la última entrega de los premios Oscar.
Pues el mayor de los méritos de este film se halla en la banda sonora que utiliza la voz original del cantante como uno de los legados más importantes que dio la comunidad negra de Estados Unidos al mundo: el soul. Aquellas melodías sufrientes de la esclavitud que nació a mediados del siglo 19, pero que en los primeros quince años del siglo pasado Charles las perfeccionara añadiéndoles un contenido menos religioso y más sensual.
Por ello es una lástima que la cinta no tradujera los temas que, por cierto, tienen un papel fundamental en la secuencia de la historia. Una trama que se basa en los decisivos siete primeros años en la vida del cantante en donde, a medida que va perdiendo la visión, adquiere las enseñanzas férreas de su joven madre para valerse por si mismo.
Todo se traduce en mostrar la ascendente carrera del artista al incorporar innovaciones en las melodías, incluyendo la genial experiencia de componer algunos de sus temas en medio de una presentación en público y obligar al coro a seguir la marcha de su desenfrenada imaginación. A esta capacidad evolutiva le sigue una persistente degradación personal por el abuso de las drogas y las relaciones extramaritales.
Con una adecuada ambientación de los años veinte, pasando por los sesenta, el film recae en tópicos comunes que bien podrían ser utilizados en biografías de grandes artistas como Elvis Presley o Jim Morrison, con la salvedad que Charles escapa a la muerte prematura para fallecer recién el 2004 a los 74 años.
Con un destacado elenco, la cinta se mueve con sutileza en el mundo del abuso y la manipulación sin incorporar a gente blanca como antagonistas. Salvo la poca originalidad en la puesta en escena, el director muestra con maestría a un Ray Charles capaz de doblegar la mano al destino comenzando por abandonar a una amante interesada más en su dinero que en su propio bienestar.Es la vida de una constante lucha por quienes se amparan en lo establecido y los prejuicios de quienes no comen ni dejan comer dando codazos contra cualquier atisbo de innovación. En Ray la historia de la música toma un nuevo curso según el ritmo del corazón de una gran mayoría y Charles fue sólo un portavoz, el artista que hizo del ritmo afroamericano un baluarte de superación para las generaciones del rock y el pop que estaban por venir.